Diario Bernabéu

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La llamaban la diosa del sol. Una partícula inusual ha llegado a la Tierra

Científicos japoneses han hecho un descubrimiento excepcional en el campo de la radiación cósmica. Han identificado una partícula altamente energética hasta ahora desconocida. Lo llamaron Amaterasu, en honor a la mítica diosa del sol, quien, según las creencias, contribuyó a la creación de Japón.

Un equipo de investigación de la Universidad Metropolitana de Osaka informa sobre el descubrimiento de una partícula inusual que ha llegado a la Tierra. Se desconoce el origen de esta partícula y su naturaleza sigue siendo un misterio. Lo único que sabemos es que forma parte de la radiación cósmica, es decir, partículas que nos llegan de diversas fuentes, tanto de nuestra galaxia como de fuera de ella.

Los rayos cósmicos tienen una energía tremenda, que supera los 10 a 18 electronvoltios (medidos en Eev o eV). Se trata de un valor un millón de veces mayor que el que se puede conseguir en los aceleradores de partículas más potentes.

Los científicos de Osaka llevan muchos años investigando este tipo de partículas. Para ello utilizan más de 500 estaciones de investigación ubicadas en un área de más de 700 kilómetros cuadrados en Utah. Durante esta investigación, el equipo descubrió una partícula con una energía de 233 MeV.

El resto del artículo está debajo del vídeo.

Partículas de superenergía de Amaterasu

La energía de la partícula recién descubierta es comparable a la energía de la partícula de rayos cósmicos descubierta en 1999, que se llamó «Oh, Dios mío». Luego, los detectores registraron un valor de energía más alto: 320 MeV.

Los científicos decidieron llamar a la partícula recién descubierta Amaterasu, en honor a la diosa del sol, quien, según la mitología, tuvo una gran influencia en la creación de Japón. Dicen que la partícula es tan misteriosa como el personaje del que toma su nombre. Las preguntas sobre su origen y naturaleza siguen sin respuesta, pero pueden conducir a nuevos descubrimientos.

– No se ha identificado ningún objeto astronómico que pueda corresponder a la dirección de donde proviene la radiación, lo que indica la posibilidad de la existencia de fenómenos y procesos astronómicos desconocidos fuera del Modelo Estándar – explica el profesor. Fuji.

El equipo de investigación planea continuar su investigación utilizando los observatorios existentes. Al mismo tiempo, están lanzando un nuevo y mejorado experimento con una sensibilidad cuatro veces mayor, llamado TAx4.

– Con la ayuda de aparatos de nueva generación, también buscaremos la fuente de esta partícula altamente energética – anuncia el investigador.